El lento ritmo de bolero acunó los versos de Angelitos Negros y los hizo populares en todo el mundo. Este himno en contra de la discriminación racial es obra de nuestro Querido Hermano Andrés Eloy Blanco, el poeta más popular de Venezuela. La nobleza de su condición humana, su idealismo de otro siglo y su amor por la libertad le costaron cárceles y exilios en la primera mitad del siglo XX. Hoy os dejamos con su poema Coloquio bajo la Palma.
Disfrutadlo. Salud, Fuerza y Unión, Hermanos. Sobre todo, mucha Salud, donde quiera que estéis.
Lo que hay que ser es mejor
y no decir que se es bueno
ni que se sea malo,
lo que hay que hacer es amar
lo libre en el ser humano,
lo que hay que hacer es saber,
alumbrarse ojos y manos
y corazón y cabeza
y después, ir alumbrando.
Lo que hay que hacer es dar más
sin decir lo que se ha dado,
lo que hay que dar es un modo
de no tener demasiado
y un modo de que otros tengan
su modo de tener algo,
trabajo es lo que hay que dar
y su valor al trabajo
y al que trabaja en la fábrica
y al que trabaja en el campo,
y al que trabaja en la mina
y al que trabaja en el barco,
lo que hay que dar es todo,
luz y sangre, voz y manos,
y la paz y la alegría
que han de tener aquí abajo,
que para las de allá arriba,
no hay que apurarse tanto,
si ha de ser disposición
de Dios para el hombre honrado
darle tierra al darlo a luz,
darle luz al enterrarlo.
Por eso quiero, hijo mío,
que te des a tus hermanos,
que para su bien pelees
y nunca te estés aislado;
bruto y amado del mundo
te prefiero a solo y sabio.
A Dios, que me dé tormentos,
a Dios que me dé quebrantos,
pero que no me dé un hijo
de corazón solitario.
Lealtad, Respeto y Honor
Lema 2019/20
El Oriente.
Segunda época – Número 356
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