Frutos de la pandemia. Da “pa to”
A machacarse que es cosa muy sana
Y sonaron las trompetas, el desconfinamiento llegó. Un atracón, 18 hoyos después de tres meses confinado. Mortal de necesidad.
Por eso, hoy, una reflexión muy breve.
¿Habéis leído la novela “El Camino” de Miguel Delibes? ¿No…? Un Novelón, con mayúsculas.
Refiriéndose a Daniel “el Mochuelo”; “El poder de decisión le llega al hombre cuando ya no le hace falta para nada; cuando ni un solo día puede dejar de guiar un carro o picar piedra si no quiere quedarse sin comer. ¿Para qué valía entonces, la capacidad de decisión de un hombre, si puede saberse? La vida era el peor tirano conocido. Cuando la vida le agarra a uno, sobra todo poder de decisión. En cambio, él todavía estaba en condiciones de decidir, pero como solamente tenía once años, era su padre quien decidía por él. ¿Por qué, Señor, por qué el mundo se organizaba tan rematadamente mal?
Bueno, planteado está. Tirando del hilo se saca el ovillo. Recordar, pensar es una cosa muy sana, aunque, a veces, frustrante.
Que os sea leve.